Actualmente el desarrollo de la Tecnología está tan extendido en todos los ámbitos de la Vida que es imposible escapar de ella. Las TICs (Tecnologías de Información y Comunicación) han adoptado un rol protagonista de tal alcance que su uso se ha hecho vital e imprescindible. Uso o Abuso de las TICs. Todas y Todos las usamos. Y nos gustan mucho.
Entonces lo que preguntamos es:
¿Uso o abuso de las TICs? ¿Las utilizo correctamente? ¿Hago un uso adecuado del móvil? ¿El tiempo que dedico a mis videojuegos es excesivo? ¿Permito que mis hij@s se pasen de hora viendo cosas en la tablet? ¿Las redes sociales virtuales son espacios seguros?¿Cuándo saber si hay un problema?¿Cómo actuar frente a las dificultades?
Para ir delimitando la situación en la que nos encontramos es imperioso aclarar que:
El uso de las TICs es una práctica positiva, constructiva y necesaria. A través de las tecnologías nos comunicamos, buscamos, encontramos, nos relacionamos, informamos y potenciamos nuestras aficiones, habilidades o profesiones. Nos abre alternativas a posibilidades infinitas al servicio de la creatividad, la curiosidad y la satisfacción de necesidades de distinta índole. De ahí la importancia de hacer un uso adecuado.
¡Usamos las Tics y nos encantan!
Dicho esto…¿Cuál sería la forma más sencilla de diferenciar entre el uso o abuso que hacemos de ellas?
Vamos a trabajar en base a dos criterios fundamentalmente para no hacernos lío:
El fin o el objeto de uso.
Cuando utilizamos un dispositivo electrónico (ya sea móvil, Tablet o cualquier otro) habitualmente lo hacemos con un fin…el dispositivo en este caso es una herramienta que nos acerca a algo que queremos.
El caso contrario se da cuando el dispositivo se convierte en un fín en sí mismo, no es una herramienta que me permite encontrar algo… sino que es el dispositivo lo que busco.
La pregunta clave sería:
¿Para qué utilizo el Whatsapp?
En el primer caso la respuesta está clara. Y en el segundo no.
No usamos las Tics simplemente porque nos gustan, además tenemos un objetivo determinado.
El segundo criterio es más delicado y hay que ser muy francos para poder clarificarlo.
El Tiempo empleado en las Tics
Dedicamos mucho tiempo a las Tics en todas partes, pero el indicador de que algo pasa no es la cantidad de tiempo empleado, sino la influencia de ese tiempo en nuestras vidas y rutinas; lo importante es seguir haciendo las cosas que nos gustan y no restar tiempo a nuestra gente por estar “conectados”, o perder tiempo de ocio o de descanso.
Las TICs han conquistado puestos en nuestro Orden de Prioridades,
pero no hay que permitir que se convierta en una de las principales.
Finalizamos con un pequeño inciso para destacar que en las consultas orientativas de Hijosdesolyluna, la preocupación más destacable en relación a la Gente Ce (jóvenes a partir de onCE años) es el uso o abuso de las tecnologías.
En la mayoría de casos haciendo una evaluación detallada se puede constatar que no hay abuso. Lo que sí percibimos es que los hábitos, las normas y los límites que imponemos en cuanto a su uso en casa son mejorables. Deberíamos reconducirlos para evitar futuras complicaciones.
Terminamos Pensando y Reflexionando para contestarNos con franqueza.
¿Para qué uso las TIcs? ¿Puedo disfrutar igual de otros tiempos y espacios donde no hay Tecnologías? ¿Me quitan de algo o sólo me aportan?¿Es el origen de conflictos en casa? ¿Se puede mejorar algo? ¿Uso o abuso de las TICs?
Si quieres desarrollar alguna cuestión en particular acerca del uso de las tecnologías, ya seas madre, padre, adolescente, educador, o formador…Contacta con HSL. Escribe. Conecta. Te estamos esperando.
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